viernes, mayo 18, 2012

Generación A

Generación A.
Douglas Coupland.
2011
Editorial El Aleph (Océano)
304 páginas.

"Cual es la definición de salud sino compartir la misma enfermedad con tu vecino."

Resulta un arma de doble filo empezar a leer un título nuevo de uno de tus escritores favoritos. Con mayor razón si el autor en sus últimas entregas ha comenzado a autofagocitarse no en cuanto a temáticas, pero si a la forma en la cual desarrolla las historias.

Generación A, de igual forma que JPOD, Microsiervos y Generación X trata sobre un grupo de jóvenes, sus visiones sobre sus trancas familiares, sus trabajos y su relación con la tecnología en un mundo esta vez sumido en un pequeño apocalipsis biológico que extrañamente Coupland no termina de detallar con profundidad.

Esta vez Coupland sumerge a sus personajes en un futuro cercano en el cual las abejas ya dejaron de existir hace mucho tiempo y productos antes comunes como manzanas y otras frutas ahora deben ser polinizados manualmente. La historia comienza cuando un grupo de cinco jóvenes en distintas partes del mundo son picados por abejas y obviamente se vuelven el centro de atención de toda la humanidad. 

Es ahí en donde Coupland logra desplegar su máxima capacidad para mezclar cultura popular  y tecnología para deslizar una pequeña crítica hacia el nuevo formato de fama de reality show, aquella que no traspasa más allá de los quince minutos de fama y que vuelve lo importante en algo banal. 

Sin embargo la historia naufraga esta vez por cansancio, ya que el autor vuelve a poner a sus personajes a relatar historias dentro de una novela y uno se siente algo defraudado al sentir esto más como un jugo extraído al poner varias de sus anteriores novelas en una juguera más que a una historia original y nueva. De igual forma como decepciona el relato lo hace la edición en español del libro, demasiado descuidada con faltas de ortografías y con errores en la solapa respecto a la nacionalidad del autor y al supuesto carácter de continuación de Generación X ya que este libro solo comparte un nexo en la similitud en el título con el primer libro del canadiense.

En conclusión un libro menor dentro de la bibliografía de Coupland que se siente escrito (y editado) con premura y sin muchas ideas nuevas que ofrecer. Sin embargo a modo personal le perdono una mala por las mejores entregadas anteriormente.